La Experiencia de Alfonso en Chamonix: Un Viaje de Aprendizaje en el Medio Natural
Nuestro querido profesor Alfonso Navia Álvarez, especialista en actividades en el medio natural, ha vivido una experiencia inolvidable en Chamonix, Francia, gracias al programa Erasmus+. Esta movilidad no solo ha sido un curso de formación , sino también una oportunidad de job shadowing y una visita preparatoria . Aquí os compartimos su enriquecedora travesía.
Una Formación Integral en la Cuna del Alpinismo
Alfonso inició su aventura el 2 de julio, partiendo desde España con destino a Ginebra, Suiza, y de allí, a Chamonix, Francia. Su objetivo era integrarse con el equipo de Terralpina, una empresa de guías de montaña, para observar y aprender de primera mano cómo se llevan a cabo las actividades de montaña en uno de los entornos más exigentes y emblemáticos del mundo: los Alpes franceses, bajo la mirada imponente del Mont Blanc.
Primer Contacto y Reunión Previa
El 3 de julio, Alfonso conoció a Marçal, un guía de montaña, y a Jorge, un cliente guatemalteco afincado en Ibiza. Este primer encuentro, que tuvo lugar en una panadería local, fue fundamental para establecer las bases de la relación profesional y personal que se desarrollaría durante los días siguientes. En esta reunión, se discutieron los detalles de la actividad, las condiciones del medio natural y el material necesario, asegurando que todo estuviera preparado para la aventura.
Progresión y Aclimatación en Alta Montaña
Los días siguientes estuvieron dedicados a la aclimatación y al aprendizaje de técnicas de progresión en terrenos variados. El 4 de julio, la jornada comenzó en el teleférico de la Aiguille du Midi, que los llevó a una altitud de 3.777 metros, proporcionando una vista espectacular del Mont Blanc y los Alpes circundantes. Durante estos días, Alfonso experimentó el mal de altura, una prueba que superó gracias a la guía experta de Marçal y a las estrategias de aclimatación aprendidas.
La Ascensión: Desafíos y Logros
El 6 de julio, Alfonso y su equipo iniciaron la aproximación al refugio de Tête Rousse, situado a 3.167 metros. La meteorología adversa y las condiciones cambiantes del terreno fueron constantes desafíos. La ascensión al Mont Blanc, planificada para el 8 de julio, estuvo marcada por fuertes vientos y nieve, que finalmente les impidieron alcanzar la cumbre. Sin embargo, la experiencia adquirida y las lecciones aprendidas durante este intento fueron invaluables.
Reflexiones y Aprendizajes
Alfonso regresó con una visión más profunda y completa de lo que significa ser un guía de montaña en un entorno tan exigente. La gestión del material, la aclimatación, las técnicas de progresión y la importancia de la seguridad fueron algunos de los aspectos clave que destacó. Además, la convivencia y el trabajo en equipo con guías y clientes de diferentes partes del mundo enriquecieron su perspectiva profesional y personal.
Esta movilidad Erasmus+ no solo fue una formación práctica, sino también una oportunidad para intercambiar conocimientos y experiencias, demostrando una vez más que el aprendizaje no tiene fronteras. Alfonso espera aplicar todo lo aprendido en su docencia, inspirando a sus alumnos a explorar y respetar el medio natural con pasión y responsabilidad.
¡Esperamos que esta experiencia inspire a más docentes y alumnos a participar en el programa Erasmus+ y a vivir sus propias aventuras de aprendizaje!
Esta experiencia de Alfonso en Chamonix destaca cómo una única movilidad puede abarcar múltiples facetas de aprendizaje, desde la preparación y observación hasta la formación práctica. ¡Un ejemplo perfecto de cómo el Erasmus+ puede transformar la educación en el medio natural!
Y si quieres saber todos los detalles de su experiencia no te pierdas la memoria que ha preparado para nosotros!!!!!
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